Objetivo:
La compañía creó el personaje de la Abueliciosa, una abuela muy moderna amante del fitness, el selfie y la moda que tiene un único propósito: que todo el mundo, especialmente los jóvenes, coma bien.
Estrategia:
La Abueliciosa no solo animaba a los jóvenes a través de su propio perfil de Instagram (@abueliciosa) a comer bien, sino que además visitó diversas universidades en Madrid, Santiago de Compostela, Salamanca y Granada subida a un triciclo y repartiendo descuentos de Just Eat entre los universitarios. A la vez que les mostraba cómo es posible comer bien, sano y variado a través de la plataforma (web y app) de Just Eat, la Abueliciosa les animaba a participar en un concurso que la compañía había puesto en marcha, en el que se sorteaban 1.000 euros para gastar en comida en Just Eat.
“Cuando empezamos a pensar en esta campaña sabíamos que teníamos que hacer algo único para conectar con un público tan exigente como son los jóvenes, saturados de marcas y en busca de propuestas diferentes. Trabajando de la mano con nuestra agencia creativa, y después de darle muchas vueltas, surgió la Abueliciosa. Concebimos a la Abueliciosa como esa persona que te mima y que quiere que comas bien para explicar de una manera divertida cómo en Just Eat puedes encontrar comida de todo tipo hasta como la que prepara tu abuela, con la ventaja de poder pedirla a domicilio en un clic”.
Resultados:
Y así es como Just Eat consiguió conquistar los corazones de los jóvenes. En tan solo un mes, la Abueliciosa consiguió 5.246 seguidores en su perfil de Instagram y sus publicaciones en esta plataforma recibieron 6.360 likes. La compañía alcanzó más de 4,5 millones de impresiones en Facebook, Twitter e Instagram.
En esta campaña, Just Eat utilizó el medio y el lenguaje que conectan con los jóvenes y consiguió así que estos se declararan fans incondicionales de la Abueliciosa.